Plan de Estimulación de Precipitaciones 2025

La Junta de Vigilancia del Río Elqui (JVRE) está en búsqueda de dar inicio al Plan de Estimulación de Precipitaciones 2025 con el objetivo de replicar los resultados obtenidos en su programa piloto del 2024, el cual  busca incrementar las precipitaciones en la región. Este plan utiliza la aplicación de yoduro de plata (AgI) mediante dos métodos complementarios: uno aéreo y otro terrestre. Ambas metodologías están diseñadas para favorecer la precipitación en zonas clave, contribuyendo a mejorar la disponibilidad de agua.

En el método aéreo, se emplea un avión para pulverizar AgI enfriado en acetona directamente sobre las nubes, induciendo lluvia en aquellas con las condiciones adecuadas. Mientras tanto, el método terrestre involucra la quema de AgI en dispositivos ubicados en áreas sobre los 1.500 metros de altura, distribuidos en puntos estratégicos de la cuenca. La combinación de ambos métodos tiene como objetivo generar un impacto positivo en las precipitaciones de la cuenca del río Elqui.

En cuanto a los resultados obtenidos en el plan piloto de 2024, es importante destacar que algunos agricultores de la región, que contaron con su propia red de pluviómetros, reportaron precipitaciones que no fueron consideradas en los informes oficiales de CEAZA – Centro de Estudios Avanzados en Zonas Áridas-  Aunque las estaciones meteorológicas de CEAZA, como la de Vicuña, reportaron 47,4 mm de lluvia, por encima del pronóstico de 40 mm, los pluviómetros de los agricultores en zonas como Algarrobal registraron hasta 101,6 mm, lo que no fue reflejado en las cifras oficiales. Esta disparidad entre los reportes de CEAZA y los de los agricultores pone de relieve una posible diferencia en la medición de los efectos de la estimulación, lo que podría indicar la necesidad de una evaluación más exhaustiva y de incorporar más datos de las redes privadas en el análisis.

Un  segundo fenómeno climático registrado, tras la estimulación, fue en el área del embalse La Laguna que acumuló un total de 17 cms, lo que equivale aproximadamente  a 77 Hm³ en equivalencia a precipitaciones nivales.

 A pesar de los buenos resultados, la controversia sobre la medición y el análisis de los datos resalta la importancia de una mayor transparencia en los informes de precipitación. Es fundamental que los datos proporcionados por los agricultores y las estaciones locales sean integrados de manera efectiva en los análisis para una visión más completa de los impactos del plan.

Para el Plan de Estimulación de Precipitaciones 2025, la JVRE ha asignado un presupuesto de $1.009 millones, con un periodo de ejecución comprendido entre el 1 de junio y el 31 de agosto del próximo año, siempre y cuando se cuente con los recursos para su desarrollo. El objetivo es generar un volumen similar al del evento anterior, buscando optimizar la cobertura en las zonas más afectadas por la escasez hídrica. A través de esta iniciativa, la JVRE pretende seguir asegurando la disponibilidad de agua para las actividades agrícolas y el bienestar de las comunidades, un desafío clave en una región tan vulnerable a la sequía.

Evaluación y Resultados del Plan Piloto 2024:

El plan piloto de 2024 fue considerado un éxito en términos de volumen de agua generado, con un total de 47,4 Hm³ capturados durante los dos eventos principales. No obstante, los informes entregados por los agricultores con pluviómetros propios registraron precipitaciones que no fueron tomadas en cuenta por las estaciones de CEAZA, lo que abre la discusión sobre la precisión y la cobertura de las mediciones. Este desfase resalta la necesidad de incluir las mediciones locales en los análisis y evaluaciones futuras, dado que reflejan realidades más cercanas al terreno, asimismo el informe final del CEAZA concluye la falta de mediciones para establecer un efectividad al programa. 

El costo de la estimulación en 2024 fue de $17,4 por metro cúbico de agua capturada, un costo razonable considerando la importancia del recurso para la agricultura y las necesidades locales. Sin embargo, la discrepancia en las mediciones entre CEAZA y los agricultores sugiere que aún hay espacio para mejorar la estrategia de recopilación de datos y la comunicación entre las distintas redes de monitoreo.

 

Perspectivas para el Plan 2025:

Para el  Plan de Estimulación de Precipitaciones 2025  la JVRE ha implementado mejoras en la logística y el análisis de los datos recogidos durante los eventos previos, buscando optimizar la eficiencia del proceso. 

Aunque se espera que el volumen de agua generado durante los eventos de 2025 sea similar al de 2024, se buscará que se  integren  las mediciones de los agricultores locales lo que permitirá una evaluación más precisa y realista de los resultados. La inclusión de una mayor variedad de fuentes de datos ayudará a calibrar mejor el impacto de la estimulación de precipitaciones en las zonas más áridas de la región, mejorando la gestión de los recursos hídricos y contribuyendo a mitigar los efectos de las sequías prolongadas.

El Plan 2025 tiene un impacto crucial en la seguridad hídrica de la cuenca del Río Elqui. Con un presupuesto robusto y la experiencia obtenida en el piloto de 2024, el proyecto promete seguir contribuyendo a la disponibilidad de agua, asegurando recursos vitales para la agricultura, la vida cotidiana y el desarrollo de la región. Sin embargo, es fundamental que se tomen en cuenta todos los datos disponibles, incluyendo los de los agricultores, para ofrecer una evaluación más precisa de los resultados y garantizar la efectividad del programa.