Esto a raíz de las malas condiciones de infraestructura que presenta el edificio de la Sociedad Agrícola del Norte, situación que llevó a sus representantes a cambiar de dirección.
Desde el lunes 27 de septiembre la Junta de Vigilancia del Río Elqui y sus Afluentes inició su funcionamiento en el Centro Empresarial ubicado en el sector del Barrio Industrial, en Tierra Blancas. El cambio a estas nuevas dependencias, se debe a las innumerables deficiencias que presenta el edificio que alberga a la Sociedad Agrícola del Norte, y con las que sus trabajadores tuvieron que lidiar, durante muchos años. Entre algunos problemas que se presentaban día a día, estaban los cortes sucesivos de electricidad y problemas sanitarios; producto de la falta de mantención de las cañerías, que ocasionaban inundaciones.
“Teníamos problemas eléctricos, sanitarios, robos e inundaciones; no sólo por lluvias sino también producto que la cañería del tercer piso, que está totalmente en mal estado, produjo anegamientos en algunas partes de las oficinas y nos dejó por meses, varios módulos sin poder utilizar. Nos inundamos en varias oficinas, incluso, con aguas servidas, por lo que se tomó la decisión de retirarnos de este edificio” señaló el Gerente y Repartidor de Aguas, Manuel Domínguez.
Nueva ubicación
Por los motivos mencionados anteriormente, y tras las cotizaciones realizadas por nuestros representantes, se pudo dar con las dependencias adecuadas, las que están ubicadas en el Centro Empresarial, oficina nº5, block 3, sector Barrio Industrial nº 701, Alto Peñuelas.
Asimismo, Manuel Domínguez, manifestó que “hago un llamado a nuestros usuarios a tener paciencia, este cambio es sólo momentáneo, mientras se construyen las oficinas institucionales, las que en este momento están en pleno proceso de licitación, además hay que dejar en claro que para su financiamiento, los recursos provienen de los dineros que se destinan para el arriendo de las oficinas y estacionamientos, que mensualmente significaban para la Junta , una suma cercana al millón de pesos, es por esa razón que nuestra organización le es perfectamente factible realizar la inversión y disminuir sus costos fijos”.
Por lo anterior, para su construcción se destinarán US$500 mil dólares, suma equivalente a unos 240 millones de pesos.
En relación al diseño arquitectónico de las futuras oficinas, estas se caracterizarán por tener un cuerpo principal que se aísla de su deslinde, la cual está definida por una estructura de acero tipo bastidor que contiene piedras extraídas exclusivamente del interior del Valle del Elqui, resaltando así la identidad visual y sensorial del río Elqui.
La fachada sur, se encuentra aislada del deslinde, la cual responde a captar la mayor cantidad de luz natural neutral directa para las zonas de trabajo. Esta fachada es tratada con aberturas en vanos de ritmos discontinuos, generando dinamismo a la imagen del edificio.
Los módulos de distribución interna de trabajo, se presentan como nichos estacionarios de captación de luz. Se define el hall de acceso y recepción de doble altura, para generar jerarquía a la distribución interna del programa. El primer nivel considera actividades con sentido de orientación pública, en el segundo nivel se generan espacios con orientación más privada de la organización.