Es preocupante ver cómo las autoridades regionales, si bien tienen una buena disposición para enfrentar el problema de la sequía no hemos visto ninguna acción concreta para mitigar sus efectos en el área de riego
Repartidor General de Aguas – Junta de Vigilancia Río Elqui y sus Afluentes
Considerando el preocupante estado de sequía en el que nos encontramos, es fundamental recordar que el agua es un bien de todos y para todos, por lo que nadie puede estar ajeno a las consecuencias preocupantes que esta escasez hídrica presenta y en donde es necesario generar un trabajo eficiente entre públicos y privados.
Un ejemplo contingente de esta sequía anunciada, es la paralización de la Hidroeléctrica Puclaro S.A. considerada la primera central de energías limpias de la Región de Coquimbo, pasando a ser una de las variadas consecuencias de esta sequía anunciada y que se está haciendo notar en gran parte de la región.
En el caso de la paralización de Hidroeléctrica Puclaro, ésta central energética estaba provista en su etapa inicial de dos turbinas para operar y desde mediados del primer semestre del 2011, sólo pudo tener operaciones con una de ellas, la que finalmente detuvo su proceso, considerando la escasez descendente de agua y que asimismo se refleja en la baja pluviometría registrada en esta zona hasta la actualidad.
Por otro lado, y aunque es difícil de creer, el turismo también ha producido una falta de eficiencia en el recurso hídrico del Río Elqui, porque en la gran mayoría de su trazado hemos detectado una serie de pozas artificiales que se han ido construyendo a lo largo del río y que han producido una gran pérdida en la eficiencia de la conducción de éste, ya que las personas al querer bañarse construyen estas pozas pero el agua por velocidad, en vez de seguir su continuidad por el rio se infiltran por los acuíferos produciendo una pérdida y que en gran medida la gente desconoce el efecto que esto conlleva para todos.
Tomando en cuenta todos estos flagelos propios de esta necesidad hídrica, es fundamental el trabajo conjunto y comprometido tanto de usuarios, pero principalmente de las autoridades, como el CORE y el Gobierno Regional para que tomen acciones en un estado de sequía preocupante en que nos encontramos. Este fenómeno fue avisado con hartos años de anticipación; sin embargo no se han visto acciones concretas para optimizar el riego, consensuando la opinión de varias organizaciones de usuarios de nuestros tres valles regionales.
Por esto, es importante que el Gobierno saque adelante, al igual que otras regiones, un programa de estimulación de precipitaciones y un concurso especial de la Ley 18.450 para el área de riego de la región. Es importante tomar en estos momentos cartas en el asunto y no esperar consecuencias más adversas y con soluciones que puedan ser tardías en una necesidad que es urgente.