Menor caudal en Río Claro obligó a duplicar entregas desde embalse La Laguna

Esta medida se tomó durante la tercera semana de febrero para mantener el lago del embalse Puclaro, el que hoy está en su mínimo correspondiente a aguas muertas con un total embalsado de 5.000.000m3, el 2,5% de su capacidad máxima.

Llamó la atención entre los regantes de la cuenca del Elqui los caudales de salida desde el embalse La Laguna, durante la tercera semana de febrero, con caudales que llegaron a los 4m3 por segundo durante febrero, mientras los históricos hablan de entre 2 a 2,5m3 por segundo.

El Gerente de la Junta de Vigilancia del Río Elqui (JVRE), Dagoberto Bettancourt Madrid, quien explicó al respecto que “el río ha tenido un comportamiento a la baja, el que se ha pronunciado las últimas semanas, por lo que se requiere que La Laguna suplemente la diferencia entre  lo requerido y lo que trae el aporte del río para poder satisfacer la demanda acordada en asamblea”.

Esta medida se tomó luego de que el nivel del embalse Puclaro llegó a un nivel mínimo, por lo que se debió aumentar el aporte del embalse de cabecera entre el 20 y 25 de febrero. El Ingeniero Sub-delegado de la JVRE, Alex Cortés Flores, detalló que la medida “obedece a que tenía que hacer llegar un volumen de agua importante para mantener la cota del lago en Puclaro y, después de lograr eso el 25 de febrero empezamos a restringir el caudal de La Laguna, cuya salida actual es de 2,6m3 por segundo”.

Frente a este cambio en la operación histórica de La Laguna, la JVRE llamó a la calma, debido a que esta temporada el embalse de cabecera se mantuvo cerrado hasta febrero, mientras años anteriores comenzaba a aportar al sistema de riego desde noviembre, gracias a lo que se logró embalsar de forma excepcional un total de 32 millones de m3.

Bettancourt agregó que “se está operando en la planificación de riego tal como se acordó en la asamblea del año pasado, estamos en la mitad de la temporada de riego y en la mitad del segundo cuatrimestre, el primero se desarrolló sin muchas novedades  y con características hidrológicas que permitieron hacer ahorros en La Laguna”.

Sobre lo anterior, Cortés detalló que “estamos en un mejor pie que lo proyectado para marzo respecto del nivel de agua en La Laguna, no así en Puclaro, donde se ha ido cumpliendo y estamos con el agua muerta del embalse”.

En abril se realizará una nueva evaluación respecto de los últimos 4 meses de operación de la temporada actual, para los que se acordó un desmarque del 20%, para lo que se medirá el comportamiento hidrológico con el fin de fijar la oferta a realizar para estos últimos 4 meses.Luego de la asamblea de regantes de octubre del año pasado, en que se acordó de forma unánime una dotación de 8.294 m3 de agua por acción, también se acordó una primera meta de 6.200m3 entregado por acción hasta abril, lo que “vamos a cumplir absolutamente según nuestro compromiso con los regantes y por eso estamos haciendo el esfuerzo sobre la laguna”.

Sobre el comportamiento del río, Cortés confirmó que  la baja en el caudal del Río Claro se notó claramente cerca del 20 de febrero, fecha en que “lo que estaba entrando al Elqui era del orden de 150 l/s, cuando el aporte normal es de 500 l/s, es decir, hubo una merma importante en el aporte al Elqui”.

Bettancourt agregó que el río ha superado los pronósticos negativos sobre los que se planificó inicialmente la operación, explicando además que “la Laguna no es  el embalse de la primera sección, sino que es el embalse que suplementa el riego para toda la cuenca y la operación que se hace sobre el es con esa visión de sistema”.