Estas instancias son convocadas por la Presidenta de la JVRE en representación del Directorio del organismo y buscan responder a dudas, además de conocer las principales necesidades para transmitirlas oportunamente a las correspondientes entidades gubernamentales con el fin de establecer medidas en pos de enfrentar la actual situación hídrica.
Desde que asumió en junio de este año el nuevo directorio de la Junta de Vigilancia del Río Elqui (JVRE), sus integrantes definieron como un eje central el trabajo de acercamiento con la comunidad para mejorar la comunicación e integración con los regantes.
Para cumplir con este objetivo se han desarrollado reuniones sectoriales que, como detalló la Presidenta de la JVRE, Mariela Arqueros Vargas, “apuntan a seguir mejorando la comunicación directa con nuestros regantes, queremos conocer las distintas problemáticas en terreno, escucharlos, conocer sus inquietudes. Hay muchas dudas respecto de lo que está pasando con el agua, que es nuestra principal preocupación, y queremos satisfacer esas inquietudes de primera fuente”.
Hasta el momento se han realizado cuatro reuniones; particularmente en Cochiguaz, Paihuano, Huanta y Chapilca; correspondientes a la primera sección del Río Elqui, instancias en las que se ha escuchado las necesidades de los usuarios para incorporarlas a las demandas que la junta de vigilancia debe hacer a los actores de gobierno que pueden incidir en obtener recursos para mitigar los impactos de la sequía.
Otro de los participantes de estas reuniones es el gerente de la organización, Dagoberto Bettancourt Madrid, quien detalló que “en estas cuatro reuniones hemos tenido la concurrencia de aproximadamente 60 personas en total y el eje central es el agua, cómo cuidamos el recurso disponible y también hacer conciencia respecto a que esta condición de poca disponibilidad se va a mantener en el tiempo, es decir, tenemos que ser capaces de reaccionar a esta realidad que corresponde a una catástrofe en nuestra región“.
Estas reuniones constituyen una política del directorio, por lo que será un trabajo permanente, así una vez terminado este primer ciclo se planificará una reunión cada tres meses en cada sector, quedando atrás las reuniones únicamente en La Serena, Vicuña y Puclaro, sino que hacerlas en el territorio.